
Infidelidad y Salud
Porque la infidelidad también puede afectar a nuestra salud.

Infidelidad, deslealtad, traición, falta de respeto…
Cuando somos infieles traicionamos la confianza de nuestra pareja. Porque la fidelidad se presupone en una pareja consolidada. Y si eso no es lo tuyo lo mejor es no tener pareja estable o dejar claras las reglas del juego para que cada uno tome las decisiones que estime oportuno.
Personalmente no soy partidaria de las relaciones abiertas porque yo a eso lo llamo estar soltera y sin compromiso y así ya hago yo lo que me dé la gana con quien me dé la gana sin tener que dar explicaciones a nadie. Pero bueno, este ya es otro tema…
¿Qué consideramos infidelidad?
Infidelidad es saltarse las reglas del juego.
Cada pareja debería establecer sus propias reglas del juego cuando su relación comienza. Estas reglas definen qué es y qué no es infidelidad dentro de su ecosistema. Y por lo tanto el concepto de infidelidad varía de unas parejas a otras.
De cualquier forma en casi todas las parejas la infidelidad se refiere al ámbito íntimo y sexual. Infidelidad puede ser el tonteo online, conversaciones sugerentes, imágenes subidas de tono, cogerse de la mano, un beso, un roce lascivo, y ya, subiendo de nivel, sexo puro y duro con otra/s perona/s.
En general infidelidad es compartir, o intentar compartir, esa parcela tan íntima con alguien que no es tu pareja.

La infidelidad conlleva mentiras y engaños. Muchas veces incluso una doble vida.
¿Cómo puede afectar una infidelidad a la salud?
La infidelidad puede afectar a nuestra salud mental.
Ansiedad y depresión tocan a las puertas de ambas partes.
Porque ser infiel es estresante, puede que emocionante, pero estresante. Mantener fraudes y mentiras en el tiempo supone mucha energía y dedicación. Y cuando te descubren suele traer consecuencias que perturban. Además, ser infiel ya no está nada bien visto. Nadie habla bien de un infiel. La imagen ante la familia, los amigos y colegas se deteriora. Por más que justifiques la infidelidad ya cargas con las etiquetas de cobarde, desleal, inmaduro, egoísta y por supuesto poco de fiar en cualquier ámbito, no solo en el de las relaciones personales. Ahí tenemos el ejemplo reciente de Shakira y Piqué. Según expertos en Marketing Digital Shakira ha ganado 3 millones de seguidores en RRSS y Piqué ha perdido uno. Su imagen se ha visto perjudicada y eso le está afectando también en su carrera deportiva. Ha demostrado que no tiene prejuicios, ni en el amor ni en los negocios. Y eso pasa factura.
La parte que sufre la infidelidad desde luego se lleva la peor parte, porque generalmente no se está preparado para descubrir que te la han metido doblada. Un desengaño amoroso puede poner en jaque nuestra autoestima que, si no es robusta, saldrá como mínimo tocada de la experiencia. Tras aterrizar y hacer balance de daños hay que trabajar en recomponerse, tomar decisiones o decidir no tomarlas. Ser la parte cornuda es complicado. Resulta abrumador. Las expectativas que familia, amig@s y compis pueden tener sobre cómo debes actuar son variopintas y todo el mundo espera que las cumplas.
Cada vez más personas tienen que recurrir a terapia tras sufrir una infidelidad. Incluso si la pareja quiere salvar la relación se hace casi imperativo el trabajar con una experta para superar la inseguridad y la falta de confianza en la parte infiel.
Si se pierde la cofianza, eje de cualquier relación sana, es difícil que éstas pueda reconducirse.

También puede poner en riesgo nuestra salud a nivel físico.
Nuestra salud en general, y también nuestra salud sexual y reproductiva puede verse gravemente afectada.
Un desengaño amoroso se acaba superando en la mayor parte de los casos. Pero los daños físicos que nos puede regalar una infidelidad pueden acompañarnos el resto de nuestros días en forma de ITS y sus secuelas.
Clamidia, infección gonocócica o gonorrea, VIH , sífilis, hepatitis C, hepatitis B y linfogranuloma venéreo…
El tan temido VPH (Virus del Papiloma Humano), que incluso puede llegar a producir cáncer y en consecuencia muerte, también se transmite por contacto sexual.
Otra de las enfermedades que ha saltado a la palestra más recientemente es la Viruela del Mono. Entre otras causas también el contacto íntimo puede propiciar su contagio.
Nada más y nada menos….
Cuando tenemos pareja estable, en muchos casos, relajamos el uso de preservativos y barreras de látex en nuestras prácticas sexuales, ya que entendemos que la otra parte no es promiscua y no corremos riesgo. Siempre dando por hecho que ambas partes están sanas y no padecen ninguna de estas infecciones y enfermedades.
Algo muy serio como para darlo por hecho…
Debería normalizarse el hecho de hacerse chequeos rutinarios en este sentido antes de bajar la guardia con una pareja sexual.

Si eres infiel mira con quién y cómo.
La persona infiel juega con ventaja. Sabe que es infiel. Sin embargo quien sufre la infidelidad suele ser la última en enterarse. No maneja toda la información y no puede protegerse.
Nada se habla de las consecuencias y las secuelas que puede dejar una infidelidad. Solo hablamos del infiel, de la infiel, de la cornuda, del cornudo, de los detalles morbosos. Hablamos de si se lo merecía o por el contrario nos da pena la persona agraviada. De si no se enteró hasta que lo tuvo delante de sus narices. Es como una telenovela. Opina todo el mundo.
La literatura, el cine y la música tampoco ayudan mucho. Nada de protección en las relaciones sexuales, o en casos contados y muy de pasada. Se desliga totalmente deseo y pasión de protección. En la ecuación de la relación íntima perfecta no suele aparecer un preservativo. Si aparece suele ser única y exclusivamente como medio para evitar un embarazo no deseado. Y, por lo menos yo, jamás he oído hablar, ni de cerca ni de lejos, de una barrera de látex para protegerse en la práctica del sexo oral.
Las ITS son algo anecdótico en las historias de amor y desamor que nos vende la sociedad. La infidelidad sí existe, pero solo su cara más superficial.
Con nuestros adolescentes tampoco es que lo hagamos de lujo. Llevamos a nuestras hijas a que les receten la píldora para evitar embarazos no deseados que les arruinen la vida, pero no les explicamos cómo se pone un preservativo. Tampoco les decimos la importancia que tiene para su salud utilizar medios de protección para evitar que una enfermedad sí les arruine la vida de verdad. A los chicos sí les damos preservativos, que seguramente no utilizarán si su pareja sexual toma la píldora. Tampoco les hablamos de que la infidelidad existe y que también les puede tocar, no vaya a ser que se desencanten antes de toparse de morros con la situación.
Si somos infieles sería bueno que tomáramos conciencia de que debemos protegernos, no solo por nosotr@s mism@s, debemos proteger también a nuestra pareja oficial y a la oficiosa.
También debemos normalizar pedir una analítica completa a nuestra pareja si nos ha sido infiel. Incluso si tenemos constancia de que lo ha intentado. Ante la duda mejor prevenir que lamentar.
Insisto. Un desengaño amoroso por infidelidad se puede llegar a superar. Las secuelas que puede dejar en tu salud pueden ser peremnes.

Si te interesa tu vida íntima, quieres mejorarla, descubrirte y redescubrirte.
Si quieres saber cómo integrar la protección en tus relaciones… Te informo y te ayudo a encontrar la inspiración que necesitas.
Mi nombre es Isabel.
Te escucho, te asesoro y te acompaño.
Y si en tu caso es preciso te recomiendo a la experta que necesites.


Soy experta en escuchar, sin juzgar, empatizando contigo, con lo que te preocupa y con lo que te sucede, en cualquier tema relacionado con sexualidad, salud sexual, relaciones sentimentales, amor y desamor. También podemos organizar una cita especial. Lo que tú necesites.
Nos reuniremos tú y yo, en un entorno acogedor en el que podemos conocernos y compartir. Felicity Boutique es el punto de encuentro. Si lo prefieres podemos hacer nuestra reunión online. Nuestra cita, cuando tú quieras.
Una reunión en el salón de mi casa, Felicity, o a través de nuestras pantallas, online. Una hora para nosotras. Para que compartas conmigo tus inquietudes, dudas y experiencias en temas relacionados con nuestra intimidad: Sexualidad, pareja y relaciones. Y si tienes peques te proporciono información básica para que resuelvas sus dudas.
Rellena y envía el siguiente formulario si deseas concertar una cita conmigo, añadiendo la fecha y el horario de tu preferencia en el apartado “Comentario, duda, sugerencia”.
Contactaré contigo para ofrecerte más info y condiciones.
Si lo prefierese envíanme Whatsapp al 681 23 02 42
En el caso de que únicamente desees información sobre productos reserva tu cita previa y te asesoraremos de forma personalizada y exclusiva.
